Fiestas Patrias, Conciencia Cívica

Buen pretexto éste de la celebración del "Grito de Independencia" y las Fiestas Patrias para comenzar la reflexión anunciada sobre el Programa de Difusión de los Valores y Principios de la Democracia que el Congreso de Michoacán, a iniciativa del PRI, le propuso al IEM (por cierto: ¿que el IEM no va a aceptar la propuesta?, ¿que no sería pertinente al menos alguna atenta respuesta del IEM al Congreso después de su exhorto?)

Celebrar efemérides bien puede llevarnos a reflexionar (y actuar) en torno a nuestra conciencia histórica y colectiva. No es la historia cosa muerta, sino viva, y no son sus pueblos sujetos pasivos, sino activos. Historia no es solo pasado, es también presente y futuro... aunque suene a discurso de concurso de oratoria...

Fue el viejo y grande don Luis González y González (ilustre historiador Michoacano, lamentablemente ya fallecido) quien nos advirtió sobre los efectos perniciosos y oxidantes de la "historia de bronce": aquella que se limita a buscar fechas en el "calendario cívico" para organizar "honores a la bandera" en los patios de las escuelas, y a llevar a la gente a recorrer museos y estatuas. La historia, como bien se sabe desde hace mucho, es cosa viva y la hacen las comunidades todos los días.

Festejar la Independencia o la Revolución o cualquier otro proceso histórico y popular debería siempre anclarnos en el papel protagónico de las sociedades ("el pueblo soberano", como antes se decía en los discursos políticos y que nuestra Constitución sigue reconociendo como sujeto primigenio del poder público y político).

Por eso ahora que nos preparamos en México para el centenario de la Revolución Mexicana (1910) y el bicentenario del inicio de la lucha por la Independencia (1810) bien nos vendría avocarnos a revisar el estado que guarda nuestra conciencia histórica y colectiva y conocer qué tan buenos o malos recursos tiene nuestro pueblo soberano para ejercer su poder constitutivo de toda institución que se establece en su beneficio, según reza nuestro ordenamiento Constitucional democrático, representativo y federal.

¿o no?