lunes, septiembre 22, 2008

15-S: primer recuento


A una semana de la barbarie, un poco de reflexión.

1) Que aunque suponemos que no lo hicieron grupos terroristas (clásicamente anclados en algún fatal fundamentalismo y no en una simple, estúpida y siniestra organización criminal), es claro que la barbarie del 15 de septiembre tiene el formato de una acción terrorista: se dirige a víctimas inocentes de manera indiscriminada para sembrar un terror también indiscriminado.

2) Que ha pasado una larga semana y no tenemos respuestas a las muchas preguntas que todos nos hacemos. ¿Quiénes son los responsables?, ¿qué quieren o qué pretendieron?, ¿quiénes, dónde, cómo los van a atrapar y castigar?, ¿podrán?, y mientras ¿qué hacemos todos los demás?

3) Que entre más tiempo pase mayor será la incertidumbre, la desconfianza, el temor. Desde luego no podemos paralizarnos, debemos seguir adelante, pero necesitamos de la voz y la acción ejemplar de las instituciones del Estado.

4) Que mientras eso ocurre necesitamos medidas legales, institucionales, creativas, respetuosas, cuidadosas y, por tanto, efectivas de autodefensa cívica (el apelativo de "cívica" no es gratuito y en cambio es señalado con toda alevosía). La comunicación y coordinación vencinal y el auxilio social me resultan los dos componentes básicos de cualquier acción efectiva que, insisto, no puede explorar vías bárbaras de justicia por la propia mano sino civilizadas de acción colectiva al amparo de la organización ciudadana que siempre se da en el marco de ley y las instituciones.

5) Que este no es un problema local, es un desafío nacional.

6) Que las instituciones del Estado y sus autoridades deben tomar conciencia de un hecho: estamos ante un punto de inflexión en nuestra historia moderna. El desafío a ellos es abierto, es claro, es cínico. Si el próximo golpe mediático lo asestan los criminales abrán ganado por mucho tiempo la partida. Simplemente: no puede permitirse. Zacatecas y su despliegue errático en busca de sospechosos sin fundamento no puede repetirse bajo ningún concepto. Tampoco la "voz cantante" de organizaciones criminales que con mantas o otros dispositivos propagandísticos reprueban la matanza y prometen venganza. Queremos, necesitamos todos, sociedad y gobierno, de una acción ejemplar, fulminante, efectiva de las instituciones; queremos creer, tener confianza, sentirnos seguros.

Hasta aquí por ahora. ¿Cómo ven?

6 comentarios:

Juan García Tapia dijo...

Uno de los textos más ilustrativos, inteligentes y honestos que yo he leído estos días, respecto del acto terrorista en Morelia el 15 de septiembre de 2008, es de la autoría de Sergio J. Monreal.
En vista de su lucidez, no he tenido más que promoverlo.
Te invito a ti y a tus lectores a que lo lean:
http://garciatapia.blogspot.com/
Me faltó decir que también es brillante.
Chao.

Carlos González Martínez dijo...

Ok. Procuraré leerlo. Gracias.

Carlos González Martínez dijo...

Mi estimado Juan,
ya leí el texto de Sergio J. Monreal.
En efecto: ilustrativo, inteligente, honesto, lúcido, brillante... para mi gusto también un poco excedido, incluso en la extensión. Entiendo que no lo califiques de certero, aunque debo aceptar que estoy de acuerdo con su sentido general.
Un abrazo
Carlos

Juan García Tapia dijo...

Ah, que delicia de texto tuyo el de las braguitas, "Bragas en la ducha". ¿Por qué no lo publicas aquí en tu blog? Me tocó leerlo en la web de "Cambio de Michoacán": http://www.cambiodemichoacan.com.mx/editorial.php?id=486&PHPSESSID=102105b75cf7cd8e61e9a9d02533e95f
Pongo el enlace por si no lo publicaras en éste tu espacio, y para que tus lectores lo disfruten.
No cabe duda que la genialidad es democrática: nunca está en exclusiva con nadie, y ahora te ha tocado: un texto breve, alumbrante, anecdótico y que concierne a todos, es decir, a cualquier adulto.
Como no se puede comentar nada en la web de "Cambio", lo hago aquí.
Un abrazo.
Chao.

Anónimo dijo...

Me gusto mucho tu articulo del CHE, coincido contigo en todo.

Un abrazo afectuoso Nacho MENDOZA

Carlos González Martínez dijo...

Gracias, mi Nacho, por tu visita y comentario. Celebro la coincidencia con el texto sobre el Che. Una más de muchas coincidencias que nos identifican!
Un abrazo
Carlos